Fundación BOMACO se encuentra realizando un levantamiento de información sobre los bioemprendimientos sostenibles en las zonas rurales de Manabí y Santa Elena; lo cual implica la protección ambiental y el desarrollo social, siempre pensando en el bienestar de las comunidades rurales, protegiendo su recurso biótico a pesar de varios impactos negativos a los que se enfrentan cada día.
Se ha levantado la información de los bioemprendimientos localizados en los ACUS de Manabí y Santa Elena.
El fortalecimiento de capacidades en las comunidades rurales que promueven la conservación de sus recursos es crucial para generar mayor interés en prácticas sostenibles. Los técnicos de la Fundación han dado talleres en los siguientes temas:
Conservación del ambiente
Buenas prácticas de manufactura
Buenas prácticas agrícolas
Abonos orgánicos
Finanzas familiares y de microemprendimientos
En las provincias de Manabí y Santa Elena, se ha reconocido remanentes de bosque de suma importancia para la biodiversidad del sector y la provisión de servicios claves para la comunidad como es la dotación de agua para las comunidades rurales y urbanas. Las mujeres en el sector se han enfocado en actividades del hogar dejando de lado el desarrollo de sus habilidades creativas y empresariales. Debido a la necesidad de generación de ingresos por parte de los miembros de dichas comunidades en muchas ocasiones sus habitantes generan producción en zonas frágiles o implementan prácticas de uso de suelo insostenible lo que provoca un impacto negativo ecosistémico.
Con todo este panorama Fundación BOMACO plantea la creación de una escuela de formación de bioemprendedores con alcance en las provincias de Manabí y Santa Elena. Buscamos que a través de esta Escuela de Bioemprendimientos se genere la primera edición en Ecuador de incubación de bioemprendimientos que promuevan productos sostenibles y sustentables para las comunidades rurales, promoviendo la resiliencia al cambio climático, con un enfoque fuerte en género. Se ha generado acercamientos con diversas comunidades rurales de Manabí y Santa Elena y es de su interés poder realizar medios alternativos que les provean de ingresos justos y dignos para ellos y sus familias.
La escuela de Bioemprendimientos contempla realizar capacitaciones en temas como: actualización de herramientas tecnológicas, desarrollo de sus ideas de negocio con enfoques en valor agregado usando la metodología Lean up, manejo de redes sociales. Adicional se proveerá un acompañamiento que incluirá las mentorías especializadas en los sectores que los participantes decidan desarrollar su idea de negocio.
El grupo objetivo que se beneficiarán del Centro de Bioemprendimiento son mujeres jefas de hogar, los cuales se encuentran en las inmediaciones a áreas de conservación de flora y fauna local.
La escuela de Bioemprendimientos implica:
1.- Impartir talleres o clases presenciales a los participantes en los siguientes temas
a.- Desarrollo de modelo de negocio con la inclusión de enfoque de genero
b.- Redes Sociales y Marketing
c.- Sistemas de producción sostenible (Agroecología y biofertilizantes) y certificaciones asociadas a producción orgánica, libre de deforestación y trato justo.
d.- Normativa y marco legal para la conservación y producción sostenible
e.- Importancia de la protección de los ecosistemas y fuentes de agua
f.- Finanzas para sus negocios
g.- Comercialización de productos
h.- Análisis de Cadena de Valor para cada emprendimiento
i.- Buenas prácticas de manufactura y atención al cliente
j.- Empaques biodegradables y diseño de marca sostenible
k.- Empoderamiento Femenino y juvenil
2.- Mentorías especializadas en cada eje de producción que el emprendedor decida realizar
3.- Participación en ferias de emprendimiento y producción orgánica
4.- Seguimiento para su emprendimiento mensuales por al menos 6 meses.
El valor agregado que buscamos con la Escuela de Bioemprendimientos es mejorar la calidad de vida de las mujeres más vulnerables, mientras promovemos el cuidado de los recursos naturales y fuentes de agua de las comunidades donde habitan las beneficiarias. En Ecuador no existe un lugar donde se promuevan las buenas prácticas productivas que en primer lugar mejoren las condiciones de vida de comunidades rurales, mientras se promueve la conservación de los recursos naturales y que permita demostrar que si es posible vivir de productos del bosque para lograr ser económicamente sustentable y ecológicamente sostenible. Poder corroborar esta hipótesis permitiría que más tomadores de decisiones se adhieran a estos procesos de conservación ambiental a nivel regional y nacional. Adicional, la metodología en sus modelos de negocios se centrará en salvaguardar el conocimiento ancestral de las comunidades involucradas alineada con alternativas de desarrollo social económico que apoyen a reducir la deforestación y promuevan una alimentación saludable mediante productos orgánicos.
